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¡Buenas a todos!
Nuestro hijo hará 3 años en octubre y todo este tiempo ha viajado en una Klippan Kiss 2. Cuando la adquirimos tuvimos que escuchar los consejos familiares, bienintencionados sin duda, pero no por ello menos equivocados: que si va a vomitar, que si viajará encogido, etc. Al poco tiempo pudimos ver que ya era la DGT la que recomendaba que los niños viajasen a contramarcha el mayor tiempo posible... ¿Vaya cosa más rara, no? En países del "Tercer Mundo" como Suecia implementaron esto hace como cincuenta años. En fin, que como padres primerizos que íbamos a ser, parece que debíamos escuchar la voz de la experiencia, en esta y otras cuestiones. Menos mal que nuestra decisión era informada (gracias a Cris de Todonenes, que nos puso sobre la pista y creo recordar que anda por estos lares) y por lo tanto era una decisión firme. En todo este tiempo no recuerdo que nuestro hijo haya vomitado una sola vez en carretera, y solo se queja, el pobre, después de viajes de 600 km, pero no por las piernas sino porque le duele el trasero. ¡Toma, y a mí también y mi "sillita" de conductor lleva hasta masaje!
Un saludo a todos los miembros del foro.
Nuestro hijo hará 3 años en octubre y todo este tiempo ha viajado en una Klippan Kiss 2. Cuando la adquirimos tuvimos que escuchar los consejos familiares, bienintencionados sin duda, pero no por ello menos equivocados: que si va a vomitar, que si viajará encogido, etc. Al poco tiempo pudimos ver que ya era la DGT la que recomendaba que los niños viajasen a contramarcha el mayor tiempo posible... ¿Vaya cosa más rara, no? En países del "Tercer Mundo" como Suecia implementaron esto hace como cincuenta años. En fin, que como padres primerizos que íbamos a ser, parece que debíamos escuchar la voz de la experiencia, en esta y otras cuestiones. Menos mal que nuestra decisión era informada (gracias a Cris de Todonenes, que nos puso sobre la pista y creo recordar que anda por estos lares) y por lo tanto era una decisión firme. En todo este tiempo no recuerdo que nuestro hijo haya vomitado una sola vez en carretera, y solo se queja, el pobre, después de viajes de 600 km, pero no por las piernas sino porque le duele el trasero. ¡Toma, y a mí también y mi "sillita" de conductor lleva hasta masaje!
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